Todos los días los medios de comunicación nos bombardean con anuncios comerciales, si no tenemos cuidado, podríamos llegar a creer que adquirir cosas innecesarias aumenta nuestro sentimiento de felicidad. La experiencia demuestra que esta afirmación está lejos de la realidad. En las últimas décadas se aprecia un auge de este consumismo que llega a afectar a los niños.
Cuando se acerca la Navidad, los fabricantes de juguetes invierten grandes sumas de dinero en publicidad con el fin de que los pequeños vean sus productos. Bajo esta presión, probablemente intentando compensar a los niños por el poco tiempo que se les dedica, se acaba comprando más regalos de los que realmente necesitan.
Aunque se haga con la mejor de las intenciones, al darles tantos regalos podríamos estar fomentando antivalores como: el egoísmo, la avaricia y el materialismo. Por el contrario, cuando se aplica la regla de los 4 regalos, se logra el efecto contrario. Descubre en qué consiste este método, cómo beneficiará a tus pequeños y qué puedes hacer para ponerlo en práctica.
¿En qué consiste la regla de los 4 regalos?
No queremos que los niños prescindan de regalos, sino que, debemos intentar que sean útiles y que les ayuden en su desarrollo. No hay que saturarles con cosas con las que probablemente ni jugaran.
Por eso, los regalos de Navidad para tus hijos deberían tener al menos una de las siguientes características:
- Algo para llevar. Esto incluye cosas que el niño vaya a usar en su día a día, como ropa o complementos.
- Algo que necesiten. Los regalos deberían enfocarse en satisfacer las necesidades de tus hijos, es decir, deben aportarles un beneficio real.
- Algo para leer. Lo ideal es que se trate de un libro en formato impreso, pero también podrías comprar una publicación en formato electrónico.
- Algo que quieran. En la medida de lo posible, los tres criterios antes mencionados deben apoyarse en este último. Por ejemplo, si a tu pequeño le gusta jugar con cohetes y naves espaciales, puedes obsequiarle con un libro que hable sobre el espacio.
Poner en práctica estas reglas implica hacer menos regalos a tus hijos, pero más educativos y de mayor calidad.
¿Cuáles son los beneficios de aplicar esta regla?
Si seguimos el método de los 4 regalos conseguiremos una serie de beneficios psicológicos y pedagógicos:
Serán más agradecidos
Un niño al que se le da todo lo que pide, y además en grandes cantidades, crece pensando que es fácil obtener todo lo que quiere. Por el contrario, los pequeños que reciben pocos regalos aprenden a valorarlos, a disfrutar jugando y a cuidar de ellos y sobre todo no se frustran si no obtienen todo lo que desean. Aprenderán también le valor de compartir. Que, entre otras cosas, les ayuda a tener empatía y a colaborar como un equipo. Descubre más beneficios de enseñarles a compartir.
Tendrán un mejor desarrollo psicológico
Muchos de los juguetes más populares pueden parecer muy atractivos, pero no son capaces de mantener el interés durante largo tiempo. Este es el caso por ejemplo de los videojuegos, aunque son divertidos al principio, seguramente se olvidará de ellos en cuanto complete todos los niveles o pruebas.
En cambio, un juego de piezas para construir puede mantenerlos ocupados durante todo el año ya que no tiene límites de lo que puede hacerse con él. Incentivaremos su creatividad, imaginación y capacidad para resolver problemas.
Disfrutarán de una mejor educación
Actualmente, es posible encontrar una gran variedad de juguetes fascinantes que son, al mismo tiempo, excelentes herramientas didácticas. Por ejemplo, hay literatura infantil que además de tener una narrativa muy interesante (incluso para los adultos), enseñan lecciones y valores necesarios para el futuro.
Si compras a tus niños estos artículos, estimularás su intelecto y esto les ayudará a tener un mejor desempeño escolar, pero de una forma lúdica. Además, en otro artículo te contamos los beneficios de leer más libros en los niños. ¡Intentemos que tengan una buena capacidad de índice de lectura!
¿Cómo aplicar el método o regla de los 4 regalos?
Ten en cuenta la opinión de tus hijos
Puedes preguntar a tus hijos qué les gustaría recibir en Navidad. Sin embargo, no siempre podrás satisfacer sus expectativas, por eso debes dejárselo claro desde el momento que hables con ellos. Además, si ven que valoras sus opiniones apreciarán más el esfuerzo que realizas.
Elige algo adecuado para él
Si quieres que tu hijo aprecie y aproveche al máximo sus regalos, estos deberían ser acordes a su edad y a su capacidad. En la mayoría de los casos, esto no debe resultar muy difícil ya que los fabricantes suelen detallar el rango de edad a quién va dirigido.
Para tomar una buena decisión en este aspecto, te recomendamos leer con cuidado las especificaciones de la caja, o bien, pedir que te asesoren en la tienda, o hacer un poco de investigación en internet. Es mejor esperar un poco para regalar un juguete para el que tu niño no está listo.
Invierte en juguetes o experiencias educativas
Los especialistas en pedagogía infantil coinciden en que jugar es una de las mejores maneras de aprender. Por lo tanto, la función educativa de un determinado juguete debería ser un factor imprescindible en tu decisión de compra. Pero además te recomendamos la posibilidad de hacerles un regalo intangible, como por ejemplo una visita en familia a un museo o al planetario.
Si eliges de forma acertada los obsequios para tus niños, los ayudarás a convertirse en mejores personas. Ese es el mejor regalo que puedes hacerles.