El día a día de la sociedad en la que vivimos es cada vez más rápido y exigente, lleno de compromisos y actividades diversas que nos hacen ir de aquí para allá sin parar. Por esta razón, guardar un rato de nuestro tiempo para parar la rutina diaria y desconectar de este ritmo frenético es básico. Dedicarte tiempo, un hábito saludable. En el artículo de hoy se habla precisamente de esto, de por qué es bueno dedicarse tiempo y cómo hacerlo. Si quieres saber más, ¡no dejes de leer!
Por qué es bueno dedicarse tiempo
¿Por qué es tan importante encontrar unos minutos al día para conectar con uno mismo? Porque necesitamos crear un equilibrio entre nuestro interior y nuestro entorno con el objetivo de afrontar los días llenos de energía, vitalidad y una sonrisa. Como en todo, para dar lo mejor de uno mismo, debemos cuidarlo cada día.
Cómo hacerlo
Son muchas las maneras. Con actividades a las que podemos recurrir para dedicarnos más tiempo, desde hacer algo que nos apasione hasta sentarnos en una silla o relajarnos con una taza de café. ¿Quieres algunas ideas? ¡A continuación te las contamos!
Yoga
El yoga es una disciplina muy antigua que pretende unificar cuerpo, mente y alma. Existe una gran variedad de disciplinas, pero todas ellas tienen este mismo objetivo. Puedes practicarlo en casa o apuntarte a clases dirigidas en las que un profesor irá marcando el ritmo de la clase.
Meditación
Dedicar unos minutos del día a meditar puede ser una manera muy útil para conectar con uno mismo. ¿Cómo puedo meditar? El primer paso es encontrar un sitio tranquilo y acogedor que nos transmita buenas vibraciones, buenos pensamientos. Siéntate en el suelo, con la espalda recta y el cuerpo relajado.La meditación sirve para focalizar tus pensamientos en la respiración (inspirar y expirar de manera constante). Intenta visualizar una imagen positiva en tu cabeza, ya sea una situación o un lugar que te llene de energía y mantén este pensamiento unos minutos. Concéntrate en ti y, poco a poco, ve relajándote y cogiendo consciencia de ti mismo. Cuando finalices tu imagen, no te levantes directamente, recupera el cuerpo poco a poco.
Relajación
Estírate en un sitio tranquilo, en el que nadie pueda interrumpirte. Inspira y expira de manera constante y, poco a poco, mueve los dedos de los pies. Centra tu atención en esos movimientos y la respiración. Tras unos segundos, relaja los dedos y mueve los pies. Ve relajando cada parte de tu cuerpo de manera progresiva, hasta llegar a la cabeza y tomando consciencia de cada rincón, extremidad y movimiento de tu cuerpo. ¿Sabías que puedes notar hasta cómo se relajan los párpados o las mejillas? ¡Pruébalo!
Actividades
Dedicar unos minutos a practicar actividades que nos gustan es una manera de llenarnos de energía cada día. Desconectar de la mano de un buen libro, bailar al ritmo de tu música preferida, salir a correr o a dar un paseo en bici, etc. Dedicarse tiempo a uno mismo puede ser muy divertido, e invertir unos minutos cada día a realizar aquello que más nos gusta es, sin duda, la mejor manera de cuidarnos.
Compartir tiempo con los seres queridos
Si bien desconectar y dedicarnos tiempo es fundamental, compartir momentos con nuestros amigos o familiares es uno de los mayores placeres de la vida. Compartir experiencias, las vivencias del día a día o, simplemente, recuerdos y planes de futuro relaja el día a cualquiera, además de sacar más de una sonrisa.
Aprovechar las vacaciones
Con la llegada de las vacaciones, paramos nuestra rutina diaria y el ritmo de vida no es tan exigente. Por esta razón es un buen momento para empezar a adoptar el hábito de conectar con uno mismo, pues suele ser más fácil encontrar unos minutos para dedicarlos a conectar. ¡Aprovecha tus vacaciones para cuidarte, dedicarte tiempo y compartirlo con quien tú quieras! Seguro que, si lo haces, volverás a tu rutina diaria con más energía y buen humor.
Y tú, ¿te dedicas el tiempo que mereces?