¿Los probióticos están de moda? ¿Son una cosa nueva? La verdad es que no, el término probiótico fue creado en el siglo pasado por un científico premio Nobel que defendía la idea de que comer productos lácteos fermentados como yogures mejoraba la salud de las personas porque aportaban al intestino bacterias beneficiosas, sustituyéndolas por los microorganismos perjudiciales. Hoy en nuestro blog te contamos todo sobre sus beneficios y dónde encontrarlos. ¿Te lo vas a perder?
¿Qué son los probióticos?
Se denomina flora intestinal al conjunto de microorganismos que viven en nuestro intestino de forma habitual y que se encargan de digerir nutrientes que nuestro cuerpo no ha podido digerir y de impedir que bacterias dañinas invadan nuestro colon.
El término probióticos proviene del griego y significa “a favor de la vida”.
Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), los probióticos son diferentes tipos de microorganismos vivos que llegan hasta la flora intestinal y que tienen la capacidad de colonizar, vivir y reproducirse. Esto ayuda a evitar que las bacterias patógenas (que causan enfermedades) se instalen en el intestino. Además, los probióticos tienen otros efectos sobre el organismo que son objeto de estudio actualmente.
¿Qué funciones realizan en mi organismo?
El consumo habitual de probióticos puede producir diferentes efectos beneficiosos sobre nuestro cuerpo como, por ejemplo, ayudar a recuperar el equilibrio de la flora intestinal y a regular el tránsito intestinal. También pueden disminuir los síntomas producidos por la mala absorción de la lactosa en las personas con intolerancia e, incluso, prevenir la diarrea producida por el tratamiento con antibióticos, reponiendo la flora intestinal. Luchar contra los microorganismos nocivos, digerir nutrientes que nuestro cuerpo no puede digerir produciendo unos ácidos grasos que sirven de energía a las células del colon y, posiblemente, aumentar la absorción de algunos nutrientes como el calcio.
¿En qué alimentos puedo encontrar los probióticos?
¿Sabías que además de aportar probióticos a tu cuerpo a través de medicamentos y complementos dietéticos existen alimentos que los contienen de forma natural? Este es el caso de los productos lácteos fermentados. Como el yogur natural pasteurizado, los quesos blandos de cabra, oveja o leche, o el kéfir (bebida preparada con leche de vaca o cabra fermentada). Fermentados de soja como, por ejemplo, el miso o el tempeh. Verduras fermentadas como el Chucrut, elaborado con col blanca fermentada. O el té de Kombucha, un té fermentado.
¿Es lo mismo un probiótico que un prebiótico?
Aunque pueda crear confusión por el parecido entre ambas palabras un probiótico y un prebiótico no son lo mismo. Cuando hablábamos de probióticos nos referíamos a microorganismos vivos. El término prebiótico se utiliza para definir ingredientes que de forma natural forman parte de los alimentos de nuestra dieta. Principalmente hidratos de carbono. Como por ejemplo, parte de la fibra de los cereales integrales, que no podemos digerir pero al llegar al colon son fermentados por las bacterias produciendo efectos beneficiosos para nuestro cuerpo. Estimulan el crecimiento de las bacterias beneficiosas de nuestra flora intestinal, favoreciendo la absorción de algunos minerales. Incluso, pudiendo prevenir la diarrea o el estreñimiento.
Dicho de otra manera, los prebióticos sirven de alimento para los microorganismos de la flora. Ayudando a nutrir a las bacterias para que proliferen y mantener un buen equilibrio de microorganismos.
Incorpora a tu dieta alimentos que le aporten a tu cuerpo probióticos y prebióticos y dale una ayudita extra a tu flora intestinal.